La serie ‘Plinio’ acaba de cumplir cuarenta años desde que se rodara en Tomelloso, un trabajo que realizó Televisión Española basado en los relatos del escritor Francisco García Pavón (novelas policíacas -con elementos costumbristas- entre los años cincuenta y sesenta), dirigido por Antonio Giménez Rico, y con guión de José Luis Garci, en la que participaron numerosos extras.
El principal personaje de la serie ‘Plinio’ fue el jefe de la Guardia Municipal (interpretado por el actor Antonio Casal) y su inseparable Don Lotario (Alfonso del Real) quienes resolvían delitos y crímenes ficticios sucedidos en el pueblo; el primero sobresalía por su gorra de plato y guerrera azul, casi siempre con un cigarrillo en la boca, así como el revólver en su parte derecha, mientras que el segundo intérprete, era el entrañable amigo del policía, hombre bajito que conducía un Seat 600.
La obra estuvo dividida en trece capítulos, siendo los más llamativos ‘Los carros vacíos’ (con varios meloneros muertos en la cuesta del ‘Hermano Diego’), ‘El carnaval’, ‘El charco de sangre’, ‘Tras la huella de un desconocido’, ‘Las hermanas coloradas’ (que fue prácticamente grabado en su totalidad en Madrid) o ‘El huésped de la habitación numero 5’, así como otros que no fueron novelados por Pavón, caso de ‘El hombre lobo’ y ‘Fusiles en tampico’, todos ellos emitidos por la primera cadena en las noches de marzo a mayo de 1972. Fue peculiar el seguimiento local que tuvo, dado que la mayor parte de familiares y vecinos se congregaron frente a los cerca de dos mil televisores en blanco y negro repartidos en la población.
El rodaje, en 1971, despertó un gran interés entre la ciudadanía, que acudía para comprobar las actuaciones y acercarse a los actores, todos ellos de primera línea, como María Isbert, Antonio Gamero, Manuel Alexandre, Francisco Vidal, Manuel Andrés y José Franco.
Fueron tiempos de los últimos coletazos del franquismo y en el que ya se señalaban algunos cambios sociales, especialmente entre los más jóvenes, como se vio en la mesa redonda sobre ‘Plinio’, organizada por el ‘Juven Club’ (ubicado en la Plaza del Mercado), en la que participaron el director de la serie, Antonio Giménez Rico, y los actores Alfonso del Real y Antonio Casal. A la cita, moderada por el presidente de este colectivo, Francisco Rosado, acudieron unas doscientas personas, principalmente ‘levitas’ (hijos de los conocidos como ‘pichuleros’), dado que los campesinos (popularmente nombrados como ‘sapetes’) no solían darle excesiva importancia a este tipo de eventos.
Ahondando en el rodaje, las cámaras se detuvieron en los hombres de la blusa con boina, fumando cuarterón en el entorno de la Plaza y la treintena de policías a las órdenes del sargento Urbano Miguel Villaescusa y el cabo Evaristo; también tuvieron un protagonismo especial determinados rincones de la ciudad como el Ayuntamiento, la Iglesia ‘La Asunción ’, las posadas de ‘Los Portales’ y ‘El Rincón’, la estación ferroviaria, Plaza de España, calle ‘Don Víctor’, ‘Alférez Provisional’, ‘General Mola’, ‘José Antonio’, ‘La Parra ’, ‘El Infierno’ y ‘Veracruz’, además de la Plaza del Mercado de Abastos y el Paseo de Circunvalación; asimismo despuntaban los primeros edificios como el de Caja de Ronda, ‘San Luis’, ‘Casa Claudio’ o los situados frente a la Glorieta ‘María Cristina’, sin olvidar los lugares de ocio, caso del Bar ‘Alhambra’, ‘Lovi’, Tasca ‘La Carmen ’, Churrería ‘La Daniela ’, Cines ‘Cervantes’ y ‘Principal’, Casinos ‘San Fernando’ y de ‘Tomelloso’ que estaba en la calle Don Víctor, vía más emblemática que servía de paseo festivo.
Además de las anteriores situaciones, los cámaras de la serie hicieron especial énfasis en la pensión ‘Oriental’, que, en aquel momento, era una de las más conocidas de la localidad.
A día de hoy, y por su especial rigor, la serie sirve para visitar lugares que todavía permanecen en la geografía tomellosera y para descubrir otros que no han superado el inexorable paso del tiempo.
‘Pona’ e Isidoro Torres valoran la obra
Una de las personas que aún recuerda la puesta en escena de la serie es José Luis Albiñana, ‘Pona’, en aquel momento concejal de Miguel Palacios, subraya el trabajo que realizó Televisión Española, si bien pone su atención en las muchas adaptaciones que sufrió la obra original de Pavón. Además, recuerda que el Ayuntamiento solo ofreció las instalaciones para el rodaje, con el fin de mantenerse al margen de la postura ideológica.
En otro orden de cosas, el periodista decano de la ciudad manifestó que Antonio Casal, intérprete de Plinio, hizo la mili con Luis Menchén, circunstancia por el cual se reunieron diariamente, entorno a un café y una copa de coñac, para compartir vivencias y analizar el desarrollo de la serie.
Mientras, el concejal Isidoro Torres, recordaba el rodaje que se hizo en la vivienda de su abuelo, Felipe Torres, situada entre la calle Hidalgo y Doña Crisanta, en el que se abordó un extraño asesinato en el transcurso del carnaval, bajo el que se oculta una trama donde se mezclan la ambición y la pasión amorosa, elemento común al resto de la serie.
En este capítulo se utiliza como escenario una de las casas más señeras, con un enorme patio y bodega, donde sobresalía el típico señorito y la sirvienta, así como el lujoso modelo 1.500, vehículo que sirvió de prueba para que Plinio descubriera al asesino de una señora cuando andaba, con una lechera en la mano, por la calle La Parra.
Torres consideró que las novelas policíacas de García Pavón han permitido hacer justicia al hombre que reinventó y dio personalidad propia a este género en España.
Cabe recordar que, en los inicios de PASOS, el autor de la obra, Francisco García Pavón, declaró que el trabajo televisivo distó de la obra original, señalando que «‘Plinio’ fue una novela policíaca que, salvando todas las diferencias, es una caricatura de ese género, como Don Quijote lo es de los libros de caballería...».
A pesar de la importancia de este personaje para Tomelloso, mucho de los jóvenes y ciudadanos en general desconocen el valor de la serie. Es lamentable que no se haga nada para poner valor a esta destacada figura.
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